Este chaleco de diseño irregular es una declaración estética que honra la asimetría perfecta de la naturaleza. Inspirado en los contornos orgánicos de La Ciénaga de Mallorquín —donde los troncos se entrelazan, el agua serpentea y la vida no sigue líneas rectas—, esta prenda se convierte en una pieza de expresión libre.
El tono vainilla evoca la luz tenue que se filtra entre los manglares, mientras que el negro aporta profundidad, como las sombras que dan forma al ecosistema. Juntos, crean un contraste sofisticado que resalta cada pliegue y cada corte inesperado.
Su confección en una base liviana pero estructurada permite que el chaleco se adapte al cuerpo con fluidez, realzando la figura sin rigidez. Los bordes irregulares simulan el movimiento del agua y la textura cambiante del paisaje, haciendo de cada ángulo una experiencia visual única.
Una prenda pensada para mujeres que abrazan la imperfección natural como símbolo de autenticidad, fuerza y belleza esencial.
